lunes, 22 de febrero de 2010

Solo quiero rozarlo con las yemas de los dedos...

¿Quien dijo que todos los lunes fuesen igual de malos?
¿Quien dijo que no amaneceria nunca?
¿Quien dijo que la esperanza se habia ido para no volver?
Quizas fui yo o quizas fuiste tu.
Pero a estas horas ya no importa.
A veces no importa ni el principio ni el final.
Solo importa un segundo.

Un segundo donde no hay tiempo.
Pero los segundos vuelan.
Donde uno ha perdido la nocion del espacio.
Pero nunca podria localizarse mejor.
Cuando uno no recuerda ni su nombre.
Ni recuerda haberse conocido mejor.

Un instante, un momento.
Tan intenso como la misma vida.
En el que rozamos la alegria.
En el que creemos saber que es la paz.
En el que creemos saber quien somos.
Y no nos importa el resto.

Solo por eso merece seguir de pie.
Solo por un simple segundo,
se puede justificar una vida entera.

Yo quiero alcanzarlo,
quiero sentirlo y fundirme con el.
Quiero ser uno con el mundo
y olvidarme del resto.
Fundirme como el rio que desemboca en la mar.

Y fundirme con la nada para siempre.
Simplemente, solo quiero rozarlo con las yemas de los dedos...
Para sentir que aun sigo vivo.