viernes, 25 de diciembre de 2009

No para de llover y las calles no pueden estar mas mojadas.
No para de llover y las aceras no pueden estar mas heladas.
Y nuestro centro de gravedad oriuentado y descansando en la nada.
En un sitio y lugar donde nunca pasa nada.
Y sigo viendo las calles mojadas, porque el agua no es la materia de la que esta hecha el cambio si no los sueños de los locos.
Y no hay adarga ni lanza en astllero que desempolvar en este siglo y en este momento. Pero si sueños por los que merece la pena perder el juicio.
Para que el juicio se extienda sobre la tierra.
Lo importante no es tener los ojos cerrados al mundo.
Lo importante es disfrutar la vida cada segundo.
Vivir experimentar y viajar para depues poder la reaidad moldear con los moldes obtenidos por el camino.
Que las experiencias y teorias que nos son ajenas no son mas que un pesado lastre del que hay que librarse sin remordimientos.
Quien dice a que sabe algo si no lo ha probado, al cuerno sus juicios y sus prejuicios, prefiero ir alli y comprobarlo yo mismo.
Y dejadme probar y vivir y no pongan fronteras ni muros sobre mi camino, que no tengo nada y a la vez lo tengo todo.
Que no tengo mas patria que el cielo abierto
y mas armas que mi alma mis lineas y mis versos.
Dadme libertad y yo perdere el aliento, quitadme todo lo que necesiteis y repartiroslo, que yo me guardo el mas preciado tesoro.
Que la libertad no se compra ni se vende pero es lo que mas cuesta.
Litros de sangre y vidad de enchido sacrificio la hiergen como una gloria de otro mundo forjada.
Y no os afaneis en recolectar tesoros de esta indole solos.
Cierto es que la libertad es de uno mismo, pero cada cual la tiene
y de igual modo es cierto negar la propia como negar la del hombre ajeno.

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